En un movimiento estratégico, YPF ha anunciado oficialmente el inicio de su retirada de áreas en varias provincias, como parte del «Proyecto Andes», dentro del plan 4×4 liderado por el nuevo presidente y CEO de la compañía, Horacio Marín. Esta operación, gestionada por el Banco Santander, implica la reducción de actividades en regiones de Chubut, Santa Cruz, Mendoza, Río Negro, Tierra del Fuego y Neuquén, con el objetivo de concentrar esfuerzos en el segmento de recursos «no convencionales».
El proyecto busca disminuir la actividad en provincias como Chubut, Santa Cruz, Mendoza, Río Negro y Tierra del Fuego, debido a la baja productividad de los pozos convencionales. YPF, empresa estatal líder en el sector petrolero, ha encomendado al Banco Santander el proceso de venta de 55 áreas de explotación de petróleo y gas convencionales, bajo el nombre de «Proyecto Andes».
El Banco Santander ya ha enviado una presentación inicial a empresas interesadas, detallando los campos maduros que YPF busca desprenderse. El objetivo principal es focalizar recursos financieros y tecnológicos en el plan estratégico de Horacio Marín, centrándose en la exploración y explotación de recursos no convencionales, especialmente en la formación geológica Vaca Muerta, extendiendo su actividad más allá de Neuquén hacia Mendoza, Río Negro y La Pampa.
El proceso de venta incluye 17 áreas convencionales en Neuquén, así como otras áreas en diferentes provincias. Las empresas interesadas tienen un plazo de 30 días para evaluar la información proporcionada y realizar sus ofertas, en clusters que agrupan tanto pozos de mayor como menor interés.
Aunque la operación en Santa Cruz aún está en discusión con el gobernador provincial, Claudio Vidal, se espera que la mayor parte de los bloques operados por YPF sean revertidos a Fomicruz, la empresa provincial, para su relicitación. Vidal ha expresado su confianza en que el retiro de YPF de los pozos convencionales no representará un obstáculo, ya que el gobierno provincial trabajará para atraer nuevos inversores.
Desde YPF, señalan que este movimiento es parte del plan «4×4» de Marín, enfocado en el desarrollo de Vaca Muerta. La caída en la producción de hidrocarburos convencionales en Argentina ha llevado a esta reorientación estratégica, buscando compensarla con el crecimiento en Vaca Muerta.
El retiro de YPF de las áreas convencionales forma parte de una estrategia más amplia, destinada a fortalecer su posición en el mercado energético y garantizar un futuro sostenible para la industria hidrocarburífera del país.
