El Gobierno oficializó este lunes una serie de cambios en la normativa para compras en el exterior, estableciendo mayores facilidades para los consumidores argentinos. La medida, publicada en el Boletín Oficial, elimina los impuestos sobre los primeros 400 dólares de cada compra para uso personal y aumenta el límite de importación a 3.000 dólares por envío, triplicando el monto permitido anteriormente.
La resolución, anunciada por la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA, ex AFIP), busca modernizar el comercio exterior y atender las necesidades actuales del sector. «En virtud de la solicitud planteada por la Secretaría de Industria y Comercio, se elevó el límite del valor FOB para la importación a 3.000 dólares. Además, los primeros 400 dólares estarán exentos de aranceles, pagando solo el IVA correspondiente», explicó el organismo.
Esta decisión devuelve el tope a los niveles establecidos en 2018 durante la gestión de Mauricio Macri y coloca a Argentina en un nivel competitivo frente a otros países de la región. Por ejemplo, Uruguay tiene un límite de 200 dólares, mientras que en Bolivia y Paraguay el tope es de 1.000 dólares. Brasil y Chile, al igual que Argentina ahora, permiten compras de hasta 3.000 dólares.
Nueva normativa y controles
Además de las flexibilizaciones, se implementará un nuevo «marco sancionatorio» para evitar irregularidades por parte de los prestadores de servicios postales y couriers. Esta medida, señalaron desde ARCA, es clave para garantizar la transparencia en las operaciones aduaneras.
Cómo realizar compras bajo la nueva normativa
Para recibir compras internacionales, se deberá cumplir con los siguientes pasos:
- Contar con un medio de pago habilitado para operar en el exterior.
- Tener CUIT y clave fiscal con nivel de seguridad 3.
- Declarar la compra en la sección «Envíos Postales Internacionales» del sitio web de ARCA, dentro de los 30 días corridos desde la recepción de la mercadería. De no hacerlo, el usuario perderá el acceso a este beneficio.
Con este paquete de medidas, el Gobierno busca fomentar un comercio más accesible y dinámico, incentivando tanto a consumidores como a pequeños importadores a aprovechar estas facilidades.