En un Monumental colmado y con un clima de fiesta, la Selección Argentina brindó otra noche inolvidable para su gente al golear 4 a 1 a Brasil en una nueva edición del Clásico de las Américas. Más allá de haber llegado al partido con la clasificación al Mundial 2026 asegurada, el equipo de Lionel Scaloni no se relajó ni un segundo y sacó a relucir todo su repertorio futbolístico y anímico.
Los goles albicelestes fueron convertidos por Julián Álvarez, Enzo Fernández, Alexis Mac Allister y Giuliano Simeone, mientras que Matheus Cunha logró el descuento para la Verdeamarela. El resultado coronó una doble jornada perfecta para la “Scaloneta” y volvió a encender la ilusión de todo un país.
máscara de Spiderman para emular su clásico festejo.
Un Monumental a puro aliento
Desde temprano, los hinchas llegaron con banderas, camisetas y hasta máscaras de Spiderman para homenajear a Julián Álvarez, nuevo ídolo de los más jóvenes ante la ausencia por lesión de Lionel Messi. El delantero del Atlético de Madrid se lució a los 3 minutos de juego y su tempranero gol desató un carnaval en las tribunas, que no paró de alentar durante los 90 minutos.
En el ‘podio’ de los más ovacionados también figuraron Emiliano “Dibu” Martínez, con su ya clásico “show” para animar a la gente, y Cristian “Cuti” Romero, que a pesar de un error en la salida que propició el gol de Brasil, fue bancado incondicionalmente por el público, que coreó su nombre en señal de respaldo.
Vinicius, Raphinha y las chicanas a Brasil
El público local no perdonó a los brasileños en ningún momento. Vinicius Jr. fue silbado cada vez que apareció en pantalla y Raphinha —quien había anunciado “darles una paliza” a los argentinos— fue recibido con abucheos e insultos desde la previa hasta el cierre del encuentro.
Asimismo, cada tanto de la Selección desató la clásica seguidilla de cánticos que recordaron la supremacía albiceleste en las últimas finales y el histórico Maracanazo de la Copa América 2021.
La fiesta después del pitazo final
Tras la goleada consumada, los jugadores argentinos se acercaron a la tribuna Sívori inferior para festejar a puro baile y cantos, rematando la jornada con el clásico “un minuto de silencio para Brasil que está muerto”. No hubo respiro para el rival en una noche 100% albiceleste.
Con la victoria, Argentina se afirma en la cima de las Eliminatorias con 31 puntos, ocho más que su escolta, Ecuador. Uruguay, Brasil y Paraguay completan el pelotón de arriba con 21 unidades cada uno.
En definitiva, la ausencia del capitán Lionel Messi no afectó el temperamento del campeón del mundo y bicampeón de América, que continúa ratificando su presente soñado. Con el pasaje a la próxima cita mundialista ya asegurado, la Selección vuelve a alimentar la ilusión de toda la hinchada, que corea cada vez más fuerte: “¡Nos volvimos a ilusionar…!”
