La neurociencia ofrece diversas actividades para potenciar funciones cognitivas como la atención y la memoria, mejorando así la comunicación oral y escrita. El lenguaje, una función cognitiva superior, requiere el correcto funcionamiento de otras habilidades cognitivas para operar eficazmente. La licenciada Florencia Basso, neuropsicóloga del departamento de Neuropsicología de INECO, explica que la fluencia verbal es una característica fundamental del lenguaje, refiriéndose a la capacidad de producir palabras de manera rápida y fluida.
La fluencia verbal, una habilidad crucial en la comunicación y el procesamiento del lenguaje, está relacionada con la memoria, la atención y la velocidad de procesamiento. En el habla, se manifiesta cuando una persona habla con facilidad, sin titubeos ni pausas excesivas, expresando sus ideas de manera coherente. En la escritura, la fluencia se refleja en la capacidad de escribir rápidamente, creando textos que fluyen naturalmente.
La fluencia verbal se divide en dos categorías: fonológica y semántica. La fluencia fonológica se refiere a la capacidad de producir palabras basándose en los sonidos del lenguaje (fonemas), mientras que la fluencia semántica se centra en la capacidad de generar palabras según su significado o relación conceptual.
Uno de los problemas comunes en el lenguaje es la anomia, la dificultad para acceder a palabras durante el habla o la escritura. Las personas con anomia suelen describir el objeto o idea que tienen en mente para recordar la palabra adecuada.
A continuación, Florencia Basso comparte cinco ejercicios para estimular el lenguaje y otras funciones cognitivas:
- Juego del Tutti Frutti:
- Reglas: Elegir al menos 4-5 categorías y pensar palabras que pertenezcan a cada una, comenzando con una letra determinada.
- Ejemplo: Categorías como nombres de países, profesiones, adjetivos, frutas-verduras y objetos de cocina.
- Variación: Encadenar palabras donde la última letra de una palabra sea la primera de la siguiente. Para mayor dificultad, usar las últimas dos o tres letras.
- Encadenar Palabras:
- Dinámica: A partir de una palabra como «lector,» encadenar palabras donde las últimas letras coincidan con las primeras de la siguiente.
- Ejemplo: Lector → Tornado → Adornar → Narrar → Raramente.
- Crear Listas Relacionadas:
- Actividad: Crear listas de palabras relacionadas por significado, categoría gramatical u otro criterio.
- Ejemplo: Agrupar ingredientes de una torta en secos y húmedos, o en los que están a temperatura ambiente y los que necesitan refrigeración.
- Formar Palabras con Letras Específicas:
- Ejercicio: A partir de una palabra como «LECTOR,» pensar qué palabras se pueden formar con esas letras.
- Ejemplo: Corte, reto, recto.
- Aprender un Nuevo Idioma:
- Beneficio: Estimula la función cognitiva del lenguaje y otras funciones como la memoria.
Estos ejercicios no solo mejoran la fluencia verbal, sino que también fortalecen otras capacidades cognitivas, favoreciendo una comunicación más efectiva y natural.